La planificación del entrenamiento en la etapa de rendimiento

Mi visión a grandes rasgos sobre el patrón de conducta en cuanto a la planificación del entrenamiento del portero en la etapa de rendimiento. Escrito y publicado durante mi etapa de cinco años (2010/2015) en el fútbol sudafricano.

Uno de los aspectos que más interesan a todos los que se sienten atraídos por el entrenamiento específico del portero es el área que hace referencia a la planificación de los entrenamientos. A continuación, con este artículo, voy a intentar mostrar a grandes rasgos cuál es mi visión al respecto y la lógica que sigo a la hora de planificar el entrenamiento aquí, en Sudáfrica. Para comenzar me gustaría comentar que no creo en los ciclos en la etapa de rendimiento, y tampoco en planificaciones que vayan más allá de una semana excepto en el tiempo que dura la pretemporada.

La planificación del trabajo que realizo durante todo el año la hago atendiendo al momento en el cual nos encontramos dentro de la competición, distinguiendo los siguientes:

Con el holandés Jan Derks, asistente de Johan Neeskens en Mamelodi Sundowns.

1. Pretemporada. Entendiendo por pretemporada la etapa comprendida entre la primera y la penúltima semana antes del comienzo del campeonato. La última semana, es decir, la semana previa al primer partido de la competición la consideraría como semana de temporada o periodo competitivo.

2. Temporada o periodo competitivo. Como su nombre indica, abarcaría las semanas en las cuales el equipo tiene competición, bien sea de Copa (tenemos hasta 3 competiciones coperas), de Champions o de Liga. Aquí habría también dos tipos de modelo a seguir atendiendo al número de partidos que se juegan durante la semana; pudiendo ser de domingo a domingo en unos casos y de domingo a miércoles o miércoles a domingo en otros. Dependiendo de un caso u otro la planificación o mi manera de trabajar va ir encaminada también en una u otra dirección.

3. Fechas FIFA o periodos de descanso en el calendario. Son los periodos de la temporada en los cuales no existen partidos de competición; bien debido a los compromisos internacionales o bien a las fechas de descanso en el calendario. Estas últimas son muy habituales aquí en Sudáfrica puesto que solamente hay 16 equipos disputando la Premier Soccer League y las jornadas de liga quedan reducidas a 30.

Atendiendo a todas estas posibles situaciones en las cuales me puedo encontrar voy planificando el entrenamiento, en cuanto a contenidos y cargas se refiere, de una manera u otra. ¿Mi visión al respecto? Pues que no sigo una planificación como tal, sino que entiendo la temporada como un viaje de prácticamente 11 meses en los cuales tengo que adaptarme a las características de la carretera, la climatología y el vehículo que tengo para realizar el trayecto.

Todo es cambiante y no sé lo que va a suceder durante este largo trayecto, así que tan solo intento adaptarme a él de la manera más inteligentemente posible para estar en las mejores condiciones posibles durante el tiempo que dure el viaje. Más que seguir una planificación lo que hago es seguir un patrón de conducta para la planificación. Es decir, dependiendo del momento de la temporada (las tres situaciones descritas)  en el cual nos encontramos, actúo y voy organizando las sesiones de una manera u otra.

Una vez expuesta mi idea general lo que haré, en los próximos artículos, será explicar cuál es mi patrón de conducta, y la lógica que empleo para cada una de esas tres etapas. Tal y como podéis observar, más que de una planificación, de lo que hablaremos será de una una lógica y un patrón de conducta.

Sudáfrica, 18 de mayo de 2012.